<<[...] Son gritos en el cielo, y en la tierra son actos>>.

Gabriel Celaya

miércoles, 12 de agosto de 2015

Una mujer desnuda en el jardín espera



Poema VIII, incluido en el apartado "La tumba de los besos tuvo nombre" del libro "Las alas de una alondra madrugando" (Editorial Hiperión), recitado por el autor.


Una mujer desnuda en el jardín espera,
no eres tú y sin embargo tuvo tu nombre un día.

Las olas son caballos con crines de azucena
que el viento agita como un almendro viejo,
la luna es un jinete de plata galopando,
si tú pudieras verlo.

Recuerdas que te dije:
Tus labios son el rojo que viste a la amapola.
Contigo junto al mar todo canta más alto.
En tus ojos azules aún se escuchan las olas.


Ahora me pregunto
de qué servía aquello,
ahora que estoy tan solo
como lo estaba entonces.

Tú nunca comprendiste
que los besos
no mueren en los labios
y que en cada palabra
yo te dejaba
la llave de una puerta.

                     (David Rey Fernández)